3 Claves para Actuar en tus Referencias de Animación

Somos Javi y Majo, profesores de interpretación en Animacting. En este artículo vamos a seguir incidiendo en la importancia de un buen trabajo de acting para animación y ofreciendo más herramientas y recursos para vosotros/as, que os dedicáis a la animación.

Hablemos sobre el trabajo de actuación frente a la cámara; ¿qué nos ocurre cuando encendemos una cámara y pretendemos grabarnos interpretando a un personaje y una situación?. Cuando no tenemos costumbre de grabarnos o estamos poco familiarizados con la interpretación, lo más normal es que nos convirtamos en una especie de robot ortopédico que en nada se parece a ese personaje que tenemos en la cabeza y mucho menos a esa naturalidad con la que nos movemos en la vida. Pero, ¿por qué ocurre esto?. Aquí teneis 3 Claves para Actuar en tus Referencias de Animación.

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Claves para Actuar en tus Referencias de Animación

1. Construcción del personaje

Actuar supone darte cuenta de que actúas y al igual que lo hace un bebé, empezar a aprender todo desde cero. ¿Por qué no somos capaces de reproducir nuestra naturalidad caminando, por ejemplo, ante la cámara? ¿Por qué nos sentimos torpes y artificiales? Esto ocurre porque en la vida, no tenemos conciencia de que realizamos todas estas acciones sencillas.

De pronto, le estamos pidiendo a nuestro cerebro que le diga a nuestro cuerpo que reaccione con naturalidad mientras le pedimos al primero que tenga conciencia de todo lo que hace y que además, condicione nuestro comportamiento por unas pautas añadidas que llamamos construcción de personaje. ¡Es normal que nuestro cerebro entre en un cortocircuito!

Sentimos deciros que no existe un secreto ni un truco para evitar pasar por este proceso tan complejo de la actuación. Al principio, siempre, o casi siempre, os vais a encontrar rígidos y ridículos ante una cámara, y es que, nos estamos enfrentando al enemigo número uno de la actuación: el pensamiento. Nuestro cerebro, nos ve hacer cosas raras y al no ver lo que en interpretación llamamos, una «justificación interna» (otro día hablaremos sobre eso) nos encontramos con que lo que hacemos carece de sentido. Esto genera esa sensación de ridículo, ni más ni menos, olvidaos de pánicos escénicos y otras posibles explicaciones que podáis buscar.

La única manera de mostrar naturalidad ante la cámara es, bajo nuestra experiencia, trabajar mucho: grabarse, grabarse y volver a grabarse. Sólo cuando tengas tu imagen asimilada y tu cuerpo empiece a asumir el acto de actuar, valga la redundancia, te encontrarás natural y podrás empezar a interpretar orgánicamente.

Si quieres saber mas sobre Acting, Appeal y puesta en escena, no te pierdas nuestro artículo lo que nunca te dijeron sobre los principios de la Animación.

2. Actuación frente a la cámara (Acting)

Una vez superada esta primera fase, que en realidad lo abarca todo y condiciona todo vuestro trabajo de actuación, os vamos a dar unas cuantas claves para actuar ante la cámara.

Lo primero es saber qué queremos mostrar ante la cámara. Es decir, cómo es el personaje que vamos a interpretar y qué le pasa. ¿De dónde sacamos esa información?: del guión o de la información que nos hayan dado sobre nuestro plano o secuencia, pero tened en cuenta que a esa información hay que hacerle las preguntas adecuadas. ¿Qué preguntas son ésas? Necesitáis saber cómo es el personaje y cuál es su circunstancia.

Un personaje no entra de la misma forma en una habitación si está alegre o si lleva dos días sin dormir, de la misma forma que la situación cambia cuando un personaje es de una manera u otra, es decir, el acting cambia si nuestro personaje es nervioso o miedoso o inseguro. «El personaje necesita una situación para revelarse«, decía el maestro de interpretación Jacques Lecoq.

3. El plano

Otro aspecto esencial que debemos tener en cuenta a la hora de trabajar ante la cámara es el plano. Las herramientas y el tamaño de nuestra actuación se transforman en función del plano que trabajamos. ¿Creéis que podemos movernos de la misma manera en un primer plano, donde sólo se nos ve la cabeza y los hombros y en un plano general, donde se ve toda nuestra figura? ¡Ojo! Porque nuestro cuerpo está activo por completo estemos en el plano que sea, aunque nos grabemos una referencia de una mano, todo el cuerpo se entera de lo que ocurre, no podemos dividir por partes nuestra actuación. Pero sí es cierto que debemos acentuar y enfatizar ciertos aspectos dependiendo del plano que trabajemos.

En un primer plano, daremos especial importancia a la expresión facial y en un americano o general, tendremos mayor libertad de movimiento. Muchas veces, el plano que trabajamos requiere unos movimientos y poses tan concretas que nos resulta casi imposible improvisar y tener libertad para actuar con naturalidad, pero esto no quiere decir que no tengamos conciencia en todo momento del plano en el que nos estamos grabando.

De pose a pose. Cuidado con esto. En ocasiones, vemos referencias en las que se cae en un trabajo demasiado ortopédico y superficial. Esto pasa porque vamos de una pose a otra sin pensar en cómo hacerlo. La actuación sirve para establecer puentes entre emociones, por eso es importante que sepamos qué estamos haciendo ante la cámara, porque en el plano se percibe perfectamente cuándo sabemos por qué pasamos de estar alegres a tristes y cuándo no. Creednos, la cámara lo recoge TODO. Para bien y para mal.

Lo ideal sería que alguien, un compañero/a, o quien sea, os ayudara en la grabación de vuestra referencia para que os asesore sobre si estáis correctamente colocados/as ante la cámara, pero sabemos que eso no siempre es posible. Lo más importante es poco a poco, ir teniendo conciencia de nuestro propio trabajo y una vez grabado, saber ser analíticos con él. Observar nuestros defectos y aciertos con el fin de fijar cosas y desechar otras. ¡Recordad que en el acting, como en la ciencia, todo se basa en el ensayo y el error!

Ahora ya tenéis algunas claves sobre cómo poneros delante de una cámara. Sabemos que esto da mucha vergüenza y que a veces hasta nos da un ataque de risa de lo ridículos/as que nos sentimos, pero creednos, eso nos pasa a todos y a todas, éste es un trabajo muy difícil y que requiere de mucho esfuerzo. ¡Mucho ánimo!

Y si deseas aprender más sobre esta innegable habilidad, aquí tienes una recopilación de los mejores Libros de Acting para aanimación. El lenguaje corporal, la expresión, el pensamiento, la actuación, los diálogos, etc, son solo algunos de principios de la actuación e interpretación que deberás tener en cuenta a la hora de crear a tu personaje y animarlo con credibilidad.

Cómo hacer una buena referencia de animación | Acting para Animadores

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